Librería Mirás (1955)

Todavía estudiaba en el colegio cuando María Consuelo Mirás Cores, Chelo, abrió su primer puesto de venta de libros, en 1.955. La idea de montar su propio negocio con 11 años le vino por una amiga de su hermana, que se sacaba un dinero con el intercambio de novelas de Corín Tellado y Marcial Lafuente Estefanía. Chelo pensó que ella podía hacer lo mismo y en la sastrería que su padre tenía en la calle General Franco de Ribeira se buscó un hueco.
La visión emprendedora de aquella pequeña demostró no ser un capricho pasajero y poco a poco el puestito se convirtió en negocio. Después su padre traslado la sastrería para un local nuevo emplazado en Rosalía de Castro y allí le acompañó Chelo. En ese mismo bajo continúa abriendo sus puertas 363 días al año la Librería Mirás.
Entre tebeos del Capitán Trueno, Esther y su mundo, El Jabato, Roberto Alcázar y Pedrín y cuentos de Sisi emperatriz fue haciéndose mocita y no tuvo necesidad de salir de la librería para encontrar a su príncipe azul. La afición de Francisco González por la lectura lo llevó a traspasar muchas veces el umbral de la tienda y así, libro a libro, fueron conociéndose, hasta que decidieron casarse. Transcurrido algún tiempo Francisco cambió el mar por la tierra y formó con su Chelo un lazo perfecto en el mundo de la librería y la papelería.
Chelo y Francisco son padres de tres hijos, dos de los cuales, Teresa y Francisco, han decidido seguir la senda familiar y hace más de una década que fundaron, también en Ribeira, la Librería Mirás 2.
Aunque Chelo y Francisco ya están próximos a jubilarse las librerías seguirán funcionando como hasta ahora lo han hecho gracias a sus dos hijos que cogen el relevo generacional en esta empresa familiar y quien sabe si en un futuro este negocio crecerá y se seguirá nutriendo para dirigirla de las futuras generaciones de esta familia de Libreros.